Distributions of species are frequently treated as responding to current environmental conditions across areas that have been accessible to them. Although that paradigm has been quite successful in describing distributional areas, the effects of land use history have been neglected in most studies to date. In this study, we analyzed effects of historical land use (i.e., 1850s to present) on distributions of four reptile and amphibian species in eastern Kansas. We fit typical species distribution models using a broad diversity of descriptors of landscape and environmental conditions, and detailed model selection exercises in all cases identified a combination of current land use and topographic features as the best defining dimensions for species' distributions. However, within the areas identified as suitable in these modeling exercises, known occurrences of each species were concentrated in areas that had been forested in the 1850s, and that remain forested. That is, although current land use was crucial, land use history was an important modifier, such that distributional ecology must look to more than just current environmental conditions in efforts to characterize species' geographic distributions comprehensively.
Las distribuciones de especies se tratan frecuentemente como si respondieran a condiciones ambientales actuales en las áreas que han sido accesibles para estas. Aunque ese paradigma ha sido exitoso en la descripción de áreas de distribución, los efectos de la historia del uso del suelo han sido descuidados en la mayoría de los estudios hasta la fecha. En este estudio, analizamos los efectos del uso histórico del suelo (i.e., desde la década de 1850 hasta el presente) en las distribuciones de cuatro especies de reptiles y anfibios en el este de Kansas. Ajustamos modelos típicos de distribución de especies usando una amplia diversidad de descriptores de paisaje y condiciones ambientales, y ejercicios detallados de selección de modelos identificaron en todos los casos una combinación de uso actual del suelo y características topográficas como las mejores dimensiones para definir las distribuciones de especies. Sin embargo, dentro de las áreas identificadas como adecuadas en estos ejercicios de modelado, las ocurrencias conocidas de cada especie se concentraron en áreas que habían sido boscosas en la década de1850 y que continúan siendo boscosas. Es decir, aunque el uso actual del suelo fue crucial, la historia del uso de la tierra fue un factor importante, de modo que la ecología de distribuciones debe mirar más allá de las condiciones ambientales actuales en un esfuerzo por caracterizar las distribuciones geográficas de especies de manera completa.