We studied nest use by Golden Eagles (Aquila chrysaetos) from 1966 to 2011 to assess nest reuse within territories, ascertain the length of time that elapses between uses of nests, and test the hypotheses that reproductive success and adult turnover influence nest switching. Golden Eagles used 454 nests in 66 territories and used individual nests 1 to 26 times during 45 continuous years of observation. Time between reuse ranged from 1 to 39 yr. Distances between nearest adjacent alternative nests within territories ranged between <1 and 1822 m, and distances between 90% of adjacent nests were <500 m. Of all nests used, 21% fell or disintegrated, and 31% were newly constructed during the study. Nest switching was not associated with the previous year's nesting success, but eagles tended to change nests after turnover of at least one member of the pair. Five of 42 nests used in 1971 and monitored continuously through 2011 were used only once and 21 were used >5 times. Two nests were unused for 21 and 27 yr after 1971 before being used every 1 to 3 yr thereafter. Eagles used 43% of the nests in series of consecutive years (range 3 to 20 consecutive nestings). Protecting unused nests for a proposed 10 yr after the last known use would not have protected 34% of all 300 nests that were reused during the study and 49% of 37 reused nests monitored consistently for 41 yr. The 102 nests that would not have received protection were in 56 of the 66 territories.

Estudiamos el uso de nidos por parte de Aquila chrysaetos desde 1966 hasta 2011 para evaluar la reutilización de nidos dentro de territorios, determinar el lapso de tiempo que transcurre entre la utilización de nidos y probar la hipótesis de que el éxito reproductivo y el recambio de adultos influencian el cambio del nido. Las águilas utilizaron 454 nidos en 66 territorios y utilizaron nidos individuales de 1 a 26 veces durante 45 años continuos de observación. El tiempo transcurrido entre reutilizaciones varió de 1 a 39 años. Las distancias entre los nidos alternativos adyacentes más cercanos dentro de los territorios osciló entre <1 y 1822 m, y las distancias entre el 90% de los nidos adyacentes fueron de <500 m. De todos los nidos utilizados, el 21% se cayó o desintegró, mientras que el 31% fue construido desde cero durante el estudio. El cambio del nido no estuvo asociado con el éxito de nidificación del año anterior, pero las águilas tendieron a cambiar de nido después de un recambio de al menos uno de los miembros de la pareja. Cinco de 42 nidos utilizados en 1971 y monitoreados continuamente hasta el 2011 fueron ocupados sólo una vez y 21 fueron utilizados >5 veces. Dos nidos no fueron utilizados por 21 y 27 años después de 1971 para ser luego ocupados cada uno a tres años a partir de entonces. Las águilas utilizaron el 43% de los nidos en series de años consecutivos (rango de 3 a 20 nidadas consecutivas). La protección de nidos sin utilizar durante 10 años posteriores al último uso conocido no hubiera alcanzado un 34% del total de los 300 nidos que fueron reutilizados durante el estudio y 49% de los 37 nidos reutilizados monitoreados constantemente durante 41 años. Los 102 nidos que no hubieran recibido protección se ubicaron en 56 de los 66 territorios.

The reproductive performance of the Golden Eagle (Aquila chrysaetos) was studied across 10–55 territories from 1980–2009, in relation to indices of their primary prey (grouse [Tetraonidae] species and mountain hare [Lepus timidus]) and cyclic vole (Myodes and Microtus) populations in northern Sweden's boreal forest. Reproductive performance was measured as the number of live nestlings ≥4 wk old (hereafter termed nestlings) per breeding attempt, the percentage of territories with nestlings, and as an annual population production index. Despite the large interannual variation in the reproductive performance of the Golden Eagle, autocorrelations did not reveal any short-term periodicity as had been predicted in the literature. Using multiple regression, we found that the index of annual population production and the percentage of territories with nestlings were significantly related to the concurrent indices of their primary prey populations. Further, the index of annual population production was also significantly related to the pooled abundance of voles (bank voles [Myodes glareolus] and field voles [Microtus agrestis]) in the previous autumn. In all, 28% of the total variation in the index of annual population production was explained by the prey population variables.

Se estudió el desempeño reproductivo de Aquila chrysaetos en 10–55 territorios de 1980 a 2009, en relación con los índices poblacionales de su presa principal (Tetrao sp. [Tetraonidae] y Lepus timidus) y las poblaciones cíclicas de Myodes y Microtus, en bosques boreales del norte de Suecia. El desempeño reproductivo se midió como el número de pichones vivos de ≥4 semanas de vida (en adelante denominados pichones) por intento reproductivo, el porcentaje de territorios con pichones y como un índice anual de producción poblacional. A pesar de la considerable variación interanual en el desempeño reproductivo de A. chrysaetos, los análisis de auto-correlación no revelaron una periodicidad de corto plazo como se predijo en la literatura. Usando regresiones múltiples encontramos que el índice anual de producción poblacional y el porcentaje de territorios con pichones estuvieron relacionados significativamente con los índices concurrentes de las poblaciones de su presa principal. Además, el índice anual de producción poblacional también estuvo relacionado significativamente con la abundancia conjunta de topos (Myodes glareolus y Microtus agrestis) en el otoño anterior. En general, 28% de la variación total del índice anual de producción poblacional fue explicado por las variables poblacionales de la presa.

We investigated the movement ecology of Bald Eagles (Haliaeetus leucocephalus) that winter along the Upper Mississippi River Valley. During late autumn and winter from March 1999 through February 2006, we outfitted with satellite transmitters 14 wild-caught Bald Eagles (12 adults, 2 subadults) on a winter range or migration stopover point in southwestern Wisconsin. These birds wintered as far south as the Mississippi and Illinois rivers, northwest of St. Louis, Missouri. Summer ranges extended out from the Upper Mississippi River Valley migration corridor as far north as Arviat, Nunavut, Canada, on the western shore of Hudson Bay. Migration route fidelity was apparent, with two notable exceptions. Fidelity to summer and winter ranges also was apparent, but variable. Some eagles remained on a small range the entire season; others traveled extensively, often to the same areas in successive years. Spring migration mean start and end dates for adults were 24 February ± 23 (SD) d and 27 April ± 40 d, respectively. Eagles took from 6–151 d to reach their summer ranges (mean: 67 ± 48 d). Mean start and end dates for autumn migration were 21 October ± 28 d and 11 December ± 16 d, respectively; travel duration ranged from 15–77 d (mean: 51 ± 20 d). Individual mean straight-line distances between core winter and summer ranges ranged from 611–2222 km (mean: 1655 ± 526 km). Our study provided new information on Bald Eagle movement ecology in a vast region where such knowledge was previously lacking. Compared to other tracking studies of Bald Eagles, our study documented greater variation in migration timing and duration, but similar range and route fidelity and distances traveled.

Investigamos la ecología de movimiento de individuos de Haliaeetus leucocephalus que invernan a lo largo del Valle Superior del Río Mississippi. Durante el otoño tardío y el invierno de marzo de 1999 hasta febrero de 2006, equipamos con transmisores satelitales a 14 individuos silvestres de H. leucocephalus atrapados (12 adultos, 2 subadultos) en un área de invernada o en puntos de parada de migración en el sudoeste de Wisconsin. Estas aves invernaron hacia el sur hasta los ríos Mississippi e Illinois, al noroeste de St. Louis, Missouri. La distribución durante el verano se extendió desde el corredor migratorio del Valle Superior del Río Mississippi hacia el norte hasta Arviat, Nunavut, Canadá, en la costa oeste de la Bahía de Hudson. La fidelidad a la ruta de migración fue evidente, con dos excepciones notables. La fidelidad a las distribuciones de verano e invierno también fue evidente, pero variable. Algunas águilas permanecieron en un área pequeña durante toda la estación; otras viajaron considerablemente, a menudo a las mismas áreas en años consecutivos. Las fechas medias de comienzo y finalización de la migración de primavera fueron 24 de febrero ± 23 (DE) días y 27 de abril ± 40 días, respectivamente. A las águilas les tomó 6–151 días llegar a sus áreas de verano (media: 67 ± 48 días). Las fechas medias para el comienzo y finalización de la migración de otoño fueron 21 de octubre ± 28 días y 11 de diciembre ± 16 días, respectivamente. La duración del viaje varió entre 15–77 días (media: 51 ± 20 días). Las distancias medias en línea recta individuales entre las áreas núcleo de invierno y verano oscilaron entre 611–2222 km (media: 1655 ± 526 km). Nuestro estudio brindó nueva información acerca de la ecología de movimiento de H. leucocephalus en una vasta región para la que faltaba este conocimiento. Comparado con otros estudios de rastreo de H. leucochephalus, el nuestro documentó una mayor variación en el tiempo y duración de la migración, pero una similitud con respecto a áreas, fidelidad de rutas y distancias recorridas.

Upper-trophic level piscivores, such as Bald Eagles (Haliaeetus leucocephalus), may be at risk of exposure to environmental contaminants in the western United States from coal-fired power plants and coal-bed methane wells. We collected 64 blood samples from nestling Bald Eagles in southeastern Montana and northwestern Wyoming during 2007–08 for analyses of heavy metals, trace elements, and organochlorine compounds. Mercury was detected in all blood samples and averaged (±SD) 0.28 ± 0.20 ppm. Most nestlings (82.8%) had concentrations near expected background levels, but 7.8% had elevated (>0.7 ppm) mercury levels. Nestlings in Wyoming (  =  0.37 ± 0.22 ppm) had higher blood mercury concentrations than nestlings from Montana (  =  0.22 ± 0.17 ppm; t₃₁  =  3.151, P  =  0.015). In Montana, nestlings sampled on Yellowstone River tributaries had lower blood mercury concentrations (  =  0.12 ± 0.10 ppm) than nestlings from the main stem of the Yellowstone River (  =  0.28 ± 0.21 ppm) and Wyoming (  =  0.37 ± 0.22 ppm; F_2,32  =  12.439, P < 0.001). Blood levels of mercury and selenium were positively correlated (r_S  =  0.281, n  =  64, P  =  0.024). Lead (  =  0.07 ± 0.08 ppm) was detected in 81.3% of nestlings, but only 11.5% of those were considered above background levels. The organochlorine p,p′-DDE (  =  0.003 ± 0.003 ppm) was detected in 69.6% of nestlings sampled. Compared to previous studies in the region, mercury contamination has become more widespread, whereas the prevalence of lead contamination was similar to that of the past. Based on this study, we suggest that some Bald Eagle nestlings may be experiencing adverse effects from mercury contamination, and recommend that additional monitoring take place as coal-fired power plants and the coal-bed methane industry continue to expand.

Each autumn, tens of thousands of raptors pass over Hawk Ridge in Duluth, Minnesota, on their southbound migration, but migratory pathways leading to Hawk Ridge are unknown. To address this issue, we counted migrating raptors between mid-August and mid-November 2008 from 24 observation points along eight transects perpendicular to the shoreline between Duluth and the Minnesota-Canadian border. Our goals were to determine migratory pathways over a large area (>2000 km²) and identify how these movements were affected by weather, time of day, season, and characteristics of the landscape. A total of 4303 raptors of 14 different species were counted during the 2008 migration season. Exploratory analyses suggested that migratory raptors concentrated near the northern shoreline of Lake Superior, particularly during midday when winds are westerly. Average migration height differed between soaring raptors (buteos and eagles) and accipiters, with >40% of soaring raptors observed higher than 100 m above the tree canopy and ≥30% of accipiters observed lower than 100 m above the tree canopy. Mixed models analysis identified the significant factors (P < 0.05) associated with total raptor migration: wind direction, time of day, temperature, and antecedent wind (number of days in which the wind did not have a westerly component prior to the observation days; R²  =  0.23). Significant factors associated with soaring-raptor migration included wind direction, time of day, temperature, and seasonal interval (e.g., early or late in the migration season; R²  =  0.17) and those associated with accipiter migration included time of day, temperature, antecedent wind, wind direction, and seasonal interval (R²  =  0.29). With the increasing popularity of wind power development, information is needed regarding avian migratory pathways to avoid bird-turbine conflicts. The methodology and design of this study provided a means to quantify the magnitude, timing, pathways, and weather conditions associated with raptor migration over a large landscape.

Cada otoño, decenas de miles de rapaces sobrevuelan Hawk Ridge en Duluth, Minnesota, en su migración hacia el sur, pero las rutas migratorias que llevan a Hawk Ridge son desconocidas. Para resolver este tema, contamos rapaces migratorias entre mediados de agosto y mediados de noviembre de 2008 en 24 puntos de observación a lo largo de ocho transectas perpendiculares a la línea de costa entre Duluth y la frontera entre Minnesota y Canadá. Nuestros objetivos fueron determinar las rutas migratorias sobre un área extensa (>2000 km²) e identificar cómo estos movimientos se vieron afectados por el clima, la hora del día, la estación y las características del paisaje. Un total de 4303 rapaces de 14 especies diferentes fueron contadas durante la época migratoria de 2008. Análisis exploratorios sugirieron que las rapaces migratorias se concentraron cerca de la línea de costa norte del Lago Superior, particularmente durante el mediodía cuando los vientos tienen dirección oeste. La altura media de migración difirió entre rapaces de vuelo planeado (especies de Buteo y águilas) y accipitéridos, con >40% de rapaces de vuelo planeado observadas a alturas mayores a los 100 m sobre el dosel de los árboles y ≥30% de accipitéridos observados a alturas menores a los 100 m sobre el dosel arbóreo. Modelos de análisis mixtos identificaron los factores significativos (P < 0.05) asociados con la migración de rapaces total: dirección del viento, hora del día, temperatura y viento antecedente (número de días en los que el viento no tuvo un componente oeste previo a los días de observación; R²  =  0.23). Los factores significativos asociados con la migración de rapaces de vuelo planeado incluyeron dirección del viento, hora del día, tempe

Despite considerable conservation interest, the Common Black-Hawk (Buteogallus anthracinus) and its breeding ecology remain understudied in its United States range. I studied the nest-site preference and nesting success of pairs breeding in the Cliff-Gila Valley, New Mexico, during 2000–01. Using data from 39 breeding attempts in 31 nests of 22 pairs, I modeled differences in nest locations relative to landscape features between nests and available non-used sites, reused and non-reused nests, and successful and unsuccessful nests. I found that Common Black-Hawk nests were in larger riparian forest patches, farther from open areas, and closer to water than non-used sites. I found no relationship between nest reuse and landscape features, but found that successful nests were in larger patches than unsuccessful nests. Correlations of nest success and nest-site preference indicated that birds had higher nest success in preferred nest sites. Although limited to one study area and two breeding seasons, these data contribute to our growing understanding of this little-studied raptor.

A pesar del considerable interés de conservación, Buteogallus anthracinus y su ecología reproductiva continúan estando poco estudiadas en su distribución en los Estados Unidos. Estudié la preferencia de elección del sitio de nidificación y el éxito de nidificación de parejas reproductivas en el Valle Cliff-Gila, Nuevo México, durante el periodo 2000–01. Usando datos de 39 intentos reproductivos de 22 parejas en 31 nidos, modelé las diferencias en la ubicación de los nidos con relación a las características del paisaje entre nidos y sitios disponibles sin usar, nidos reutilizados y no reutilizados, y nidos exitosos y no exitosos. Encontré que los nidos de B. anthracinus se encontraban en parches de bosque ribereño más grandes, más lejos de áreas abiertas y más cercanos al agua que los sitios no utilizados. No hallé una relación entre la reutilización de los nidos y las características del paisaje, pero encontré que los nidos exitosos se encontraban en parches más grandes que los nidos no exitosos. Las correlaciones entre los nidos exitosos y las preferencias de elección del sitio de nidificación indicaron que las aves tuvieron un éxito de nidificación mayor en los sitios de nidificación preferidos. Aunque estos datos están limitados a una sola área de estudio y a dos estaciones reproductivas, contribuyen al conocimiento de esta especie rapaz poco estudiada.

American Kestrel (Falco sparverius) populations have been declining throughout much of North America during recent decades. To determine if the ectoparasite burdens of nestlings may be a contributing factor, we examined broods of kestrels in nest boxes in northwestern New Jersey. Our objectives were to identify and quantify the arthropod ectoparasites of nestlings, and to determine if removing these parasites from nestlings would increase kestrel nesting success. Of 26 broods we examined, we randomly chose 13 and manually removed from the nestlings all visible arthropods during three visits, when nestlings were age 5–7, 10–12, and 15–17 d old; we handled the 11 control broods similarly but did not remove arthropods. Both the experimental and control broods were measured and banded at age 20–22 d, and all visible arthropods were collected from both groups. Of 1767 arthropod specimens collected, 1679 (95.0%) were Carnus hemapterus (Diptera: Carnidae). Our observation of the next most abundant parasite, Ornithonyssus sylviarum (northern fowl mite, Acari: Macronyssidae; 46 specimens), was apparently the first record of the American Kestrel as host. The remaining 42 specimens included 9 other kestrel parasites (4 species) and 33 nonparasites (19 species). C. hemapterus loads increased as nestlings aged, were highest at age 10–12 d, and declined thereafter. At age 20–22 d, control broods had significantly higher loads of C. hemapterus and other parasites. However, we detected no significant differences in nestling wing length, tail length, body mass, body mass/wing length (an index of nestling condition), or nestling survival. Thus, we found no evidence that ectoparasite removal would be an effective strategy in increasing the nesting success of American Kestrels in this study area.

Durante las últimas décadas, las poblaciones de Falco sparverius han disminuido a lo largo de la mayor parte de América del Norte. Para determinar si la carga de ectoparásitos de los pichones puede ser un factor que contribuye a la disminución, examinamos las nidadas de F. sparverius en nidos caja en el noroeste de Nueva Jersey. Nuestros objetivos fueron identificar y cuantificar los ectoparásitos artrópodos de los polluelos y determinar si la remoción de estos parásitos de los pichones incrementa el éxito de nidificación de la especie. De las 26 nidadas que examinamos, escogimos 13 al azar y quitamos manualmente todos los artrópodos visibles de los pichones durante tres visitas, cuando las edades de los polluelos eran de 5–7, 10–12 y 15–17 días. Manipulamos las 11 nidadas de control de manera similar pero no les quitamos los artrópodos. Tanto la nidada experimental como la de control fueron medidas y anilladas a los 20–22 días de edad y todos los artrópodos visibles fueron colectados en ambos grupos. De 1767 especímenes de artrópodos colectados, 1679 (95.0%) pertenecieron a la especie Carnus hemapterus (Diptera: Carnidae). La observación del siguiente parásito más abundante, Ornithonyssus sylviarum (Acari: Macronyssidae; 46 especímenes) fue, aparentemente, el primer registro para F. sparverius como hospedador. Los 42 especímenes restantes incluyeron otros nueve parásitos de F. sparverius (4 especies) y 33 individuos no parásitos (19 especies). Las cargas de C. hemapterus aumentaron a medida que los pichones crecían hasta los 10–12 días de edad y a partir de entonces disminuyeron. A la edad de 20–22 días, las nidadas de control presentaron cargas significativamente mayores de